Cada año se generan más de 50 millones de toneladas de e-waste o basura electrónica

Nosotros ayudamos a reducirla
y a reciclarla correctamente
Un informe presentado en el Foro de Davos recuerda que cada año se producen más de 50 toneladas de “e-waste”
Es necesario que se haga una buena gestión de los aparatos electrónicos y electrodomésticos fuera de uso, ya que actualmente su mala gestión después de su uso ha derivado en una plaga. Según los expertos, se trata de una de las peores plagas de la era de las nuevas tecnologías y el comercio global.
Es por ello que Naciones Unidas ha presentado en el Foro de Davos un informe donde se concluye que se producen más de 50 millones de toneladas de e-waste al año. Un ejemplo de esta basura electrónica son los teléfonos móviles, ordenadores, electrodomésticos pequeños como tostadoras, batidoras o cafeteras, así como electrodomésticos grandes como pueden ser frigoríficos, lavadoras, lavavajillas, hornos u ordenadores, entre otros.
Según la ONU, de estos 50 millones de toneladas de desechos electrónicos y electrodomésticos, el 80% de ellos acaba en vertederos o en el medio natural sin la gestión de reciclaje adecuada. Este nuevo informe sectorial ha sido publicado por iniciativa de siete entidades de la ONU, entre las que destaca la Universidad de Naciones Unidas y el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
En Manzaneque Cooper estamos muy concienciados de la tarea de todos para mejorar el medio ambiente, por ello gestionamos de manera eficiente el punto limpio de la localidad de Manzanares para que los residuos que se recogen tengan una buena gestión. En este caso nos encargamos de recoger, gestionar y reciclar todos los aparatos electrónicos y electrodomésticos que llegan para poder tratarlos de manera eficiente y efectiva y que cada uno de ellos vaya a la planta de reciclaje adecuada.

En este sentido, los resultados y propuestas que se recogen en el informe de la ONU han sido presentados en el Foro Económico de Davos (Suiza) bajo el nombre de “Una nueva visión circular para la electrónica: es hora de un reinicio global” (A New Circular Vision for Electronics) y con el apoyo del Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible.
Los datos de este informe internacional indican que menos del 20% de la basura electrónica mundial se recicla correctamente y reclama una acción global para poner en práctica en este sector el nuevo concepto de la economía circular.

En este sentido, los autores del estudio destacan la necesidad de mejorar los procesos de recogida selectiva y reciclaje creando cadenas de valor circulares globales, además de defender el uso de nuevas tecnologías para que estos procesos de recogida sean más efectivos.
El informe señala que la eficiencia de los materiales, la infraestructura de reciclaje y la ampliación de volumen y la calidad de los materiales reciclados serán esenciales para que la sociedad no tenga problema con este tipo de residuos.
En términos económicos
62.500 millones de dólares es la cantidad que se estima en pérdidas por la mala gestión de este tipo de residuos electrónicos. Los autores señalan en este sentido que hay 100 veces más oro en una tonelada de basura electrónica que en una tonelada de mineral de oro.
La cantidad generada cada año equivale a todos los aviones comerciales fabricados en la historia o 4.500 torres Eiffel suficientes para cubrir totalmente la superficie de Manhattan con el símbolo parisino.
En esta línea, el director del programa de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU), Ruediger Kuehr, explicó a la Agencia Efe que hay una gran oportunidad para reducir la cantidad de los desechos electrónicos generados a través de los que se llama “economía circular”, pero que es necesario actuar de inmediato.

Desde esta entidad pretenden cambiar los hábitos, ya que las previsiones auguran que en 2050 se generarán 120 millones de toneladas de basura electrónica si no se gestiona bien. Ésta puede ser tóxica, no es biodegradable y “se acumula en el medio ambiente, en la tierra, el aire, el agua y los seres vivos”, explica Kuehr.
La mitad de todos esos desechos la generan los llamados dispositivos personales, como son ordenadores, teléfonos móviles y tabletas a televisiones. El resto, como hemos dicho anteriormente son electrodomésticos como lavadoras, aires acondicionados y calefacciones.
Dentro de los residuos de origen doméstico, 31.258,75 toneladas corresponden a residuos de intercambio de temperatura como frigoríficos, congeladores o aires acondicionados, los cuales, mal gestionados, tienen un impacto negativo para la atmósfera.
El informe también advirtió sobre la creciente amenaza de contaminación que suponen las baterías, aunque estas no están incluidas en los flujos de basura electrónica, especialmente por el previsto incremento de las ventas de vehículos eléctricos.
Para 2030 se estima que se desecharán 11 millones de toneladas de baterías y para 2025 el peso de las que son de litio-ion, las más populares, que se vendan al año alcazarán 5 millones de toneladas.
En cuanto a las baterías, en Manzaneque Cooper, también nos encargamos de su gestión y reciclaje, ya que se trata de uno de los elementos más contaminantes dentro de este compendio de productos que forman parte de esta basura electrónica.